Por René Salomón

René Salomón es director ejecutivo de la Fundación Trabajo Empresa y un emprendedor comprometido en el desarrollo de jóvenes, mujeres y comunidades productivas en el área rural con innovación y tecnología sin descuidar lo ambiental, social y económico. Él es agrónomo y economista agrícola con especialidad en derecho agrario, innovación y emprendimientos.


El apoyar el desarrollo de emprendedores, promover que los jóvenes accedan a tecnología y trabajar en las comunidades del área rural para que aprendan herramientas que les permita competir en un mercado cada día más digital. ¿Es un sueño o es una realidad que vivimos cada día las personas que trabajamos de la mano del impacto social y tecnológico?

A esto se suma que, con un equipo, estamos por concluir la tercera versión de una competencia global exigente y que hoy por hoy, es el fiel reflejo de la tendencia cambiante en tecnología y Startups de Triple Impacto. El Entrepreneurship World Cup (Copa Mundial de Emprendedores) Bolivia 2021, valora este tipo de experiencias, las que permiten delinear un modelo de negocio — desde el momento en el que surge la idea — donde la formación de talento es secundaria cuando un joven define su propio modelo de vida, identificando sus debilidades, pero mucho más importante explorando sus potencialidades en este tipo de eventos. Agradecido por el apoyo recibido y sorprendido por la potencialidad de cada una de las ideas o startups presentadas en este año. Muy pronto tendremos los resultados y sabremos quienes estarán entre los 100 mejores del mundo compitiendo en noviembre en Riyadh – Arabia Saudita.

Paralelamente, el 2021 estamos trabajando de la mano del Sistema Emprendedor de Sucre – Bolivia, acompañando a empresas e instituciones comprometidas con el desarrollo de jóvenes, tecnología y negocios. En ese sentido, 10Minds, la Cámara Junior Internacional (JCI) y estructuras como CAINCO y el Banco de Desarrollo Productivo, bajo el liderazgo del sector empresarial y la Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca, han tomado el reto de fortalecer el talento y generar capacidades que permitan a emprendedores, validar y desarrollar un servicio/producto con valor diferencial y generar conexiones con diversos sectores por medio de la incubación de ideas y desarrollo de empresas en marcha, gracias al apoyo de Helvetas Bolivia.

Por otro lado, y en el mismo sentido de lo expuesto anteriormente, el 19 de julio del presente año, en las redes sociales de la Fundación Trabajo Empresa escribimos un mensaje bajo los siguientes términos: “Estamos trabajando para traer al mundo una nueva generación de innovadores. La única forma en que podemos hacerlo es enseñándoles ahora. Es por eso que brindamos educación informática y de alta calidad a todos los niños, jóvenes y por supuesto adultos de Bolivia y el mundo”

Un gran reto para las PYMES es el de validar negocios digitales donde sean acompañados por equipos emprendedores en el comienzo de su iniciativa de negocio, muy similar a la historia de un niño que en el tiempo, potencia sus capacidades y concluye entendiendo las cosas básicas que poco a poco serán el reflejo de un posible emprendedor o negocio. Sin embargo, es una de las ofertas de acompañamiento a los emprendedores y empresarios, pero como en muchas áreas se requiere de una mayor presencia de diversas estructuras público – privadas.

Desde 2010, la Fundación Trabajo Empresa ha potencializado los emprendimientos digitales y fortalecido las capacidades de los jóvenes con programas de formación y acceso a empleo, a través de una iniciativa que, como un “intra-emprendimiento” institucional, ha mejorado año tras año bajo un proceso de aprendizaje constante. Hoy, con el reto de apoyar a ciertos sectores de la economía, apostamos a compartir con equipos de emprendedores la ruta para el inicio de emprendimientos digitales sostenibles, a partir de enfoques y herramientas metodológicas adaptadas al contexto boliviano.

En el marco de lo expuesto y con el propósito de apoyar al “ecosistema de innovación”, es importante fortalecer la presencia de diferentes actores que se interrelacionen entre sí con el fin de generar alianzas, conocimiento y nuevas estructuras de colaboración y complementariedad dentro de una competencia proactiva con el fin de convertir una idea en un proceso, producto o servicio para el mercado.

Finalmente, queremos resaltar una nota publicada por Brian X. Chen de TECH FIX a inicios de este año, donde nos indica que la “tecnología invadirá nuestras vidas” y que estamos frente a otro año en el que los servicios de internet dominarán muchos aspectos de nuestro día a día.

Este año indicaba: “las tecnologías de las que probablemente oiremos hablar no serán los aparatos de lujo como los teléfonos inteligentes o los televisores de pantalla grande. Serán las cosas que no solemos ver: software de trabajo y productos de internet cuya hora ha llegado”.

Por otro lado, ya es común escuchar: … que la inteligencia artificial (IA) está llamada a ser autoridad de la gestión pública en los gobiernos de América Latina. No hace falta que nos vayamos a la ciencia ficción: actualmente se está usando IA para reducir la deserción escolar, para detectar a evasores de impuestos, para identificar casos de Covid o para señalar ineficiencias en la contratación pública y reducir los niveles de corrupción. (CAF 2020)

Finalmente, y tal como iniciamos este Blog, que teníamos antes de que el coronavirus transformara nuestras vidas y como nos adaptamos a la tecnología que a menudo se había ignorado. Las aplicaciones de nuestros dispositivos, que antes eran poco útiles o muy sofisticadas, se convirtieron de repente en herramientas comunes en nuestro medio. Y lo más interesante, los emprendimientos ya no se miden por el grado de conocimiento o la cantidad de recursos que tengas, sino por la forma que puedan acceder usando incluso los medios tradicionales que hoy por hoy, siguen siendo válidos para educarse y trascender en los negocios como es la pequeña tienda de barrio que logra construir una red de WhatsApp para ofertar su producto estrella de cada mañana.